domingo, octubre 01, 2006

BAPRO

Era un jueves a la madrugada, ella le había comentado que tenía aquella fantasía, y a él le había gustado la idea... eligieron el jueves porque pensaron que sería uno de los momentos en que menos gente andaría; y así era, esa madrugada no había un alma en la calle. La noche estaba fría, podían ver el vapor de su aliento en cada palabra pronunciada; se pararon en la otra vereda, y observaron... ahí estaba, con vidrios semi espejados y además esfumados del medio metro hacia arriba; justamente por eso lo habían elegido. Él no se animaba a dar el primer paso, en su cabeza daba vueltas la idea de que tenía que usar su tarjeta; y si esta quedaba registrada?... además, seguramente había cámaras de seguridad dentro.

Ella lo tomó de la mano y con un decidido "vamos" lo hizo cruzar la calle. Él pasó su tarjeta, abrieron la puerta, y antes que terminara de cerrarse ya se estaban besando. Apurados se quitaron las camperas; ambos estaban nerviosos, se besaban y se acariciaban con torpeza; ella empezó a frotarle el miembro por encima del jean, respiraban agitadamente; se miraron a los ojos y comenzaron a reírse... una risa producida por los nervios, que sirvió como lenitivo y los tranquilizó un poco... se besaron nuevamente, ahora un poco más calmos; él metió su mano por debajo de la ropa, acariciándole la cintura y subiendo hacia sus pechos. Los amasó mientras ella le desabrochaba el jean; él comenzó a besarle el cuello... a morderle y chuparle la oreja, y seguía acariciando esos senos, mientras ella ahora desabrochaba su propio pantalón... se lo quitó y pegaron sus cuerpos, sintiendo como la dureza y la humedad atravesaban el boxer y la tanga. Él recogió su campera, agarró del bolsillo los profilácticos, y mientras los abría ella liberó el pene de su boxer, sobándolo... sus miradas se cruzaban, eran miradas cómplices, de picardía; el morbo de lo que estaban haciendo había erizados todos sus vellos, abierto todos sus poros dejándolos exhalar lujuria.

Mientras él se puso el preservativo ella se acariciaba suavemente el clítoris, su vagina estaba empapada, miró alrededor buscando cámaras de seguridad, no las encontró, no estaba segura de que hubiera; tal vez ocultas... sí, probablemente... la sensación de estar siendo grabados la excitaba enormemente; miró hacia fuera, para ver si había alguien... nadie; él la tomó de sus mejillas y la besó, ella corrió su tanga y dirigió el pene hacia su cueva; la primera envestida fue sublime, eléctrica, la excitación era grandiosa... el morbo de la situación hacía que el coito los arrancara de este mundo, estaban absortos, completamente inmersos en el sexo. Ella se subió a upa, lo rodeó por la cintura con sus piernas, produciendo una penetración profunda; él continuó bombeando, deleitándose cada vez que introducía su miembro por completo. Empezaba a sentir sus piernas cansadas cuando ella comenzó a gemir más fuerte, aguantó y siguió penetrándola, cargando el peso de ambos. Ella sintió un cosquilleo ardiente que invadió su cuerpo, gimió de placer y aguantó su aliento intentando aprisionar ese orgasmo dentro de ella. Él al escucharla gemir se excitó aún más y sintió como su eyaculación se acercaba, esas pequeñas contracturas en su pene. Cuando ella suspiró, dejando salir ese orgasmo; sintió como un segundo orgasmo la invadía, como un fuego interno le hacía ebullir la sangre; un orgasmo pleno, más intenso que el primero, cada músculo de su cuerpo se contracturó y se distendió en un instante; y justo antes de que sus sentidos la abandonaran por completo ahogándose en un océano de placer, sintió como él llegaba, sintió como le clavaba el pene y este latía en su interior. Sus gemidos se mezclaban y revoloteaban por todo el cajero. Las piernas de él cedieron, y cayeron sobre las camperas, su miembro seguía dentro de esa cálida humedad; tardaron un minuto en recuperar el aliento... y se besaron, apasionadamente; sus lenguas se acariciaron, cómplices de haber hecho algo prohibido.


13 comentarios:

Anónimo dijo...

hermoso!

leer estos relatos es algo realmente excitante, me encanta

Tenshi dijo...

ajaja gracias linda, mi fiel lectora :P

la semana que viene tengo un parcial, así que tenés (o tienen si alguien más lee el blog) la obligación de tirarme ondas positivas (?)... y bueh, probablemente no suba nada por unos días... así que extráñenme mucho xD

Beso, nos vemos mañana

Anónimo dijo...

exi... no no, SUERTE seria para vos :P


y si no vas a subir nada, ok no ahi drama, pero espero q lo proximo q subas sea un relato como este y no de las otras

Anónimo dijo...

Excelente!!

Esta genial, todo lo que escribis..

Y este relato, tan sensual, y excitante, es precioso ;)

PD: De una Lectora..

Anónimo dijo...

Lindo relato... estemm.. donde queda ese cajero ^^

Tenshi dijo...

klady, obvio que soy un mediocre, está a la vista de todos en este blog :`(


Gracias anónimo (o anónima)... que por cierto, utilizás dos puntos suspensivos en vez de tres, sin faltas ortográficas pero sin acentos... creo saber quien sos :P


Malik, hasta que no termines con tu dieta no hablo con vos, no rompas men, aflojá con la lechuga y vamos a comer algo y a tomar unas birritas con lo pibe xDD

Anónimo dijo...

Estas, seguro? Creo, que te equivocas...a y de mediocre nada, escribis, Muy bien! =P

Tenshi dijo...

mmm... no estoy seguro... pero si no me equivoqué, y sos quien creo, los mojis que estabas buscando los podés encontrar en la parte derecha de la página (en "Powered By")... si me equivoqué, entonces ese bichito blanco que mueve las manitos se llama moji :P

Anónimo dijo...

Muy lindo el relato! Este me gustó mucho :D
Y suerte en la facu!

Anónimo dijo...

La atracción de lo prohibido, el vértigo del peligro. Me encanta cómo lo has contado.

Besos orgiásticos.

Tenshi dijo...

Goodness, gracias men



Ella, un placer tenerte comentando mi blog, Diosa de textos embelesados y orgías colosales... caricias lascivas para ti

Trisha dijo...

wao!! a ti debe sentarte la frase "las fantasías son para cumplirse"

Anónimo dijo...

para calentarte con esto tenes que estar muy necesitada.
Comprate un consolador boluda...